El pasado lunes celebramos un momento muy especial: la graduación de nuestros alumnos de 6º de Primaria. Es difícil creer que ya han pasado nueve años desde que estos chicos y chicas entraron por primera vez por la puerta del colegio, muchos de ellos con caritas de nervios y emoción. Desde entonces, han crecido, aprendido y se han convertido en los increíbles jóvenes que vemos hoy.
Para muchos de nuestros graduados, el colegio ha sido como una segunda casa. Aquí han hecho sus primeros amigos, han aprendido a leer y a escribir, han descubierto su amor por la ciencia, el arte, el deporte, y han tenido tantas experiencias que llevarán en sus corazones para siempre.
Recordamos con cariño esos primeros días en Infantil, cuando todo era nuevo y emocionante. Esos momentos de juegos, canciones y risas que llenaban los pasillos y las aulas. Y cómo olvidar los proyectos, las excursiones, las obras de teatro y las tantas actividades que hemos compartido. Cada año ha sido una aventura, y cada uno de ustedes ha dejado una huella imborrable en nuestro colegio.
El carisma que han recibido de nuestro querido Jesús y María es algo que siempre los acompañará. Nos llena de orgullo ver cómo han adoptado esos valores de amor, respeto, solidaridad y fe. Son ejemplos vivos de lo que significa llevar en el corazón el mensaje de Jesús y María. Sus acciones diarias, su forma de tratar a los demás y su actitud ante la vida son reflejo de este aprendizaje tan valioso.
Queremos agradecer a las familias, que han sido el pilar fundamental en esta etapa. Su apoyo, amor y confianza en nosotros han sido esenciales. Gracias por caminar junto a nosotros y por ser parte de esta gran familia.
A nuestros maravillosos graduados, les decimos: ¡Felicitaciones! Han logrado mucho y esto es solo el comienzo. El mundo está lleno de oportunidades y sabemos que están preparados para enfrentar cualquier desafío que venga. Lleven siempre con ustedes los recuerdos de estos años, los amigos que han hecho y las lecciones que han aprendido.
Este no es un adiós, sino un «hasta pronto». El Colegio Jesús Nazareno siempre será su hogar y nosotros siempre estaremos aquí para vosotros.
¡Os deseamos lo mejor chicos!
